Historia
En 1973, el aumento demográfico que vivía el país en sus diferentes cantones, trajo consigo el deseo de cada vez más jóvenes con deseos de educarse y prepararse para los nuevos retos del mercado laboral y proyectos de vida, como consecuencia, la mayoría de los colegios existentes se abarrotaron y su capacidad no fue suficiente para dar servicio a toda la población, de manera que el gobierno debe intervenir en la creación de centros de enseñanza, sobre todo de tercer ciclo, en las cabeceras de cantones.
Por su parte, la comunidad de San Isidro observa con preocupación que se venían fundando colegios en los cantones vecinos, pero solo una minoría de sus jóvenes contaba con los recursos para trasladarse a ellos, aún menos aquellos de las zonas más alejadas del centro.
Por lo anterior, un grupo de isidreños decide comenzar una lucha para que San Isidro tuviera, al igual que sus vecinos, su propio colegio; el cual permitiera que los jóvenes de todos sus distritos y lugares circundantes pudieran cumplir sus anhelos de concluir la enseñanza secundaria. De esta manera, surge el comité Pro-Colegio, encabezado por don Carlos María Villalobos García, de grata memoria.
Se unieron a esta iniciativa los señores Porfirio Villalobos Jiménez, Willian Sánchez, la profesora Odilie Chavarría, el Presbítero Tarcisio Mendez, don Guillermo Arce H., don Jesús Sánchez, el profesor Álvaro Chaves S., la profesora María de los Ángeles Campos, la profesora Aracelly Villalobos y don Edgar Vargas.
El comité Pro-Colegio realiza gestiones en la Asamblea Legislativa, en el Ministerio de Educación Pública y en otros entes gubernamentales para que acogieran su inquietud. En la Asamblea Legislativa, recibe un gran respaldo por parte del Lic. Daniel Oduber Quirós, presidente de la Asamblea Legislativa en ese periodo, en el Ministerio de Educación Pública; el entonces ministro de esa cartera; el profesor Uladislao Gámez Solano, da el visto bueno para que continúen con sus gestiones.
En 1973, bajo la dirección de don Carlos Villalobos Ugalde, se da el nacimiento de esta noble casa de enseñanza, iniciando sus labores en las instalaciones de la Escuela José Martí, con una población de 140 estudiantes, los cuales eran vecinos del cantón central de San Isidro, Concepción de San Rafael, Barrio Lourdes, Los Ángeles y San Luis de Santo Domingo. Al no contar con instalaciones propias, la directora de la Escuela José Martí, profesora Marielos Campos y la Junta Administrativa, gentilmente accedieron a la petición de que los niños de primaria estuvieran en horario matutino y los de secundaria en horario vespertino. Según cuenta el Sr. Carlos Villalobos, al no contar con ningún recurso, se da a la tarea de conformar la primera Junta Administrativa y una Asociación de Padres de Familia, apoyados del Presbítero Tarcisio Méndez.
Durante su estancia en las instalaciones de la Escuela José Martí, se crea el escudo de la institución por el profesor Francisco Bogantes, así como la letra y música del himno del liceo, a cargo del profesor Francisco Avilés Vega. También, se crea el comedor escolar, la biblioteca y un comité de becas, encargado de ayudar a los estudiantes de escasos recursos.